La satisfacción laboral es uno de los elementos claves en el panorama de RR. HH. contemporáneo.
Se trata de una cuestión más que demostrada. Por ejemplo, la revista Harvard Business Review ha publicado, a partir de varios estudios, un análisis que desvela que, de media, un empleado satisfecho con su trabajo obtiene un 31 % más de productividad en comparación con aquel que no haya alcanzado tal satisfacción. Además, el mismo estudio afirma que un empleado feliz y satisfecho será hasta un 37 % más efectivo con las ventas1.
En definitiva, es evidente la relación que existe entre satisfacción laboral y productividad; casi tanto como la conexión entre la satisfacción y la atracción o retención de talento.
Todo ello, unido a un cambio de paradigma del profesional (ahora se tienen más en cuenta cuestiones extrasalariales como la conciliación), ha generado una nueva tendencia en recursos humanos a ocuparse de cuestiones como la satisfacción laboral.
Satisfacción y experiencia laboral
Locke, en una de sus definiciones más conocidas de satisfacción laboral, afirma que la satisfacción es un estado resultante de la evaluación del trabajo y de la experiencia del empleado2. Precisamente, en los últimos años, se han hecho esfuerzos en RR. HH. para incidir sobre la experiencia laboral con el fin de potenciar la satisfacción del trabajador.
Mejorar la experiencia es una tendencia especialmente notoria en las grandes empresas estadounidenses, que en 2019 han gastado de media 3,6 millones de dólares en programas de bienestar3.
En general, estas medidas están enfocadas a aumentar la satisfacción a través de estrategias como ofrecer programas de wellness y wellbeing, mejorar la calidad del aire y de la iluminación de las instalaciones o proporcionar menús variados y saludables para las pausas de comida.
La mayoría de estas medidas se ha centrado en mejorar la experiencia del empleado dentro de la oficina, pero puede que todo ello ya no sea tan relevante en la actualidad, es decir, en plena situación de pandemia global.
La experiencia del empleado en la era de la nueva normalidad
Se estima que, debido a la pandemia de covid-19, hasta un 88 % de las organizaciones ha alentado o forzado a sus empleados a practicar el teletrabajo4.
La nueva normalidad obliga a los responsables de RR. HH. a replantearse el concepto de experiencia de un empleado que ahora trabaja en casa. El objetivo no es otro que crear un vínculo más significativo y duradero entre empleado y empleador, que trascienda los límites físicos y evolucione a una relación de teletrabajo.
Por tanto, uno de los objetivos prioritarios de recursos humanos en estos tiempos de la nueva normalidad es la revisión de las políticas enfocadas a mejorar la experiencia laboral.
Saber gestionar la experiencia de los empleados sigue siendo una cuestión prioritaria, ya que solo así el empleador podrá entender cuáles son las motivaciones del empleado y saber qué medidas funcionan o no con cada uno de ellos.
En un estudio realizado por Future Workplace han consultado a diversos líderes empresariales y responsables de RR. HH. planteándoles la siguiente pregunta:
¿Cómo espera que cambien sus funciones de RR. HH. en 2020?
- Más centrados en la experiencia de empleado: 50 %
- Mayor énfasis en la tecnología (IA y automatización): 41 %
- Más atención a la gestión del rendimiento: 35 %
- Mayor aplicación de people analytics: 32 %
- Más importancia de la diversidad y la inclusión: 30 %
Como se ve, la mitad de los líderes empresariales y de RR. HH. consultados apuesta por la satisfacción del empleado como elemento clave en 2020.
¿Por qué mejorar la experiencia del empleado en 2020?
Centrarse en mejorar la satisfacción y la experiencia del empleado en tiempos de pandemia podría parecer una cuestión menor en estos momentos donde las preocupaciones generales se encuentran en lugares aparentemente opuestos. Pero la realidad es que existen varias razones por las que la experiencia de los empleados es, hoy en día, más importante que nunca. Veamos por qué:
Más trabajo
Los que se hayan visto forzados a teletrabajar lo saben: se trabaja más desde casa que desde la oficina. No se trata de una consulta a los trabajadores, sino más bien de un análisis objetivo a los medidores VPN, que han determinado que los trabajadores españoles tienen una jornada hasta dos horas más larga cuando teletrabajan5.
Si bien muchos empleados prefieren el teletrabajo como alternativa conciliadora, en tiempos de covid-19 un alto número de ellos tiene que hacer malabares para satisfacer las crecientes demandas del empleador, del cónyuge o pareja y de los hijos. Las empresas han de buscar soluciones para mejorar la gestión del tiempo y del trabajo de los empleados desde casa.
Una cuestión mental
La pandemia, y el contexto extralaboral en general, también tiene una incidencia clave en el trabajador. Un estudio realizado por SHRM a 1.099 trabajadores estadounidenses en 2020 ha desvelado que el 41 % de los empleados se sienten exhaustos con su trabajo, mientras que el 45 % se encuentran emocionalmente agotados6.
Así se comprueba que el contexto actual no ayuda a sobrellevar mejor nuestra relación con el trabajo. En este 2020 queda mucho por hacer en cuanto a satisfacción y experiencia laboral en general.
Desconexión entre empleado y empleador
Por último, el crecimiento sin precedentes de las tasas de desempleo ha generado cierta actitud escéptica por parte de los empleados hacia las organizaciones. Los empleados buscan, ahora más que nunca, desarrollar conexiones emocionales en momentos de distanciamiento social y aislamiento también con las empresas con las que trabajan.
Desarrollar conexiones emocionales con los empleados es especialmente importante y más ahora que las empresas están reduciendo los trabajadores a tiempo completo al tiempo que aumentan la digitalización y la automatización en el lugar de trabajo.
Aunque el panorama laboral ya no sea como el de antes, cuestiones como mantener al equipo satisfecho, motivado y centrado en sus funciones nunca perderán vigencia.
- [1]Examining the Relationship Between Workplace Satisfaction and Productivity.
- [2]Locke, E. A. (1976). «La naturaleza y las causas de la satisfacción laboral». En MD Dunnette (Ed.), Manual de psicología industrial y organizacional (pp. 1297-1349). Chicago: Rand McNally.
- [3]Large Employers to Average $3.6M on Wellness Programs in 2019
