Atraer a los mejores empleados y mantener viva su motivación y compromiso es un reto al que se enfrentan por igual las empresas de todos los tamaños y sectores. Una plantilla feliz y satisfecha con su trabajo es el factor principal en la receta del máximo rendimiento en las empresas, y esto se cumple tanto para las grandes compañías como para las micropymes.
Gracias a las nuevas soluciones de retribución flexible, las pymes pueden incorporar a sus políticas de retribución los mismos ingredientes que las grandes organizaciones incluyen ya en su propuesta de valor para el talento. Click Para TwittearAdemás, las nuevas plataformas online permiten una personalización máxima y agilizan enormemente todo el proceso. Es decir, se pone al alcance de empresas con plantillas reducidas las mismas herramientas que las más grandes y a un coste que asegura la rentabilidad de su inversión.
¿Cómo puede incorporar la pequeña empresa un plan de retribución flexible?
Todos estos servicios están libres de carga fiscal o esta es limitada, lo que para los empleados se traduce en un ahorro que aumenta directamente su poder adquisitivo con el mismo sueldo en su nómina. Por su parte, para la empresa solo supone un coste mínimo de gestión y no afecta a la masa salarial, ya que al no aumentar el bruto del empleado, la base de cotización no cambia.
Una vez contratado el servicio, la empresa solo debe escoger los productos y servicios que desea incluir en el plan, y son los propios empleados los que lo pueden configurar y gestionar desde cualquier ordenador o mediante una app móvil.
Descarga la guía completa para conocer más sobre cómo incorporar un plan de retribución flexible en la pequeña empresa.
Qué ventajas presenta un plan de retribución flexible para una pequeña empresa
Para una empresa que decide incorporar un plan de retribución flexible a su propuesta de valor a los empleados, el retorno de la inversión está asegurado, puesto que el coste de ponerlo en marcha es prácticamente inapreciable al lado de los beneficios que proporciona:
-
Aumenta la satisfacción de los empleados.
Al recibir más con el mismo sueldo se asegura su compromiso, y este, como señalan todos los estudios, es la base del buen rendimiento de una empresa.
-
Mejora la conciliación y el equilibrio entre vida personal y laboral
Los servicios que incluye la retribución flexible ayudan a hacer la vida más fácil a los trabajadores, lo cual sin duda contribuye a aumentar la felicidad de los trabajadores.
-
Reduce el absentismo y las bajas.
La mejora de la conciliación, a su vez, ayuda a que los empleados no tengan que preocuparse de cuestiones como la comida diaria, el transporte o el cuidado de sus hijos pequeños. Así, durante su jornada pueden centrarse por completo en sus tareas y la eficacia de las operaciones de la empresa también se ve potenciada.
-
Mejora la imagen de la empresa.
Tanto a nivel de marca corporativa como en cuanto a la atracción de los mejores profesionales, una buena política de retribución flexible ayudará a la empresa a diferenciarse de la competencia.
-
Optimiza la gestión administrativa.
Las nuevas plataformas online y apps móviles hacen más sencilla que nunca la utilización de estos servicios, eliminando por completo el papeleo y simplificando al máximo la gestión.
Teniendo en cuenta todas estas ventajas, si una pequeña empresa quiere situar sus políticas retributivas al nivel de las grandes compañías multinacionales, sin duda la retribución flexible será el camino más directo para conseguirlo.
