Atraer a empleados con talento no es fácil, pero retenerlos es muchas veces uno de los retos más complejos a los que se enfrentan numerosas empresas.
¿Cómo puedes retener a tus empleados a largo plazo? Existen numerosas estrategias que puedes usar. A continuación, te mostramos algunas que hemos seleccionado al ser las que más están implementando en la actualidad los departamentos de RR. HH.:
Ofrecer programas de formación
La formación es un gran incentivo motivador que puede ofrecerse como un valor añadido de la empresa para retener el talento. Ofrecer una formación continuada a los empleados no solo ayuda a retenerlos, sino que también tiene un gran impacto en el día a día del propio negocio. Después de todo, un trabajador mejor formado estará más capacitado para desarrollar su función de una forma más efectiva y productiva.
El sector empresarial evoluciona de forma muy rápida, y las nuevas tecnologías, las técnicas de venta y el enorme impacto de internet son razones de peso para mantener a los empleados en un rodaje de aprendizaje y actualización continuos.
Esta formación continuada puede llevarse a cabo de diferentes formas:
- Invirtiendo en tecnología y software actualizado para facilitar el trabajo de los empleados y que todos puedan desarrollar habilidades informáticas adicionales.
- Organizando programas de mentoring, que pueden llevarse a cabo dentro de la propia empresa o fuera, en otras compañías, organizaciones o universidades.
- Impartiendo seminarios y clases presenciales u online.
Pagar bien a los empleados
Además de ofrecer formación, las empresas pueden retener el talento de los mejores trabajadores ofreciendo salarios atractivos. En este sentido, el salario suele ir relacionado con las habilidades, la experiencia y la responsabilidad de los empleados.
A veces, los sueldos aumentan cuando la demanda de cierto tipo de talento en las empresas supera la oferta existente. La antigüedad del trabajador también puede ser un factor importante a la hora de revisar un aumento de sueldo. Y la localización geográfica de la empresa influye en el coste de la vida del lugar en el que está situada, y esto incide a su vez en los salarios.
Proporcionar beneficios atractivos
Los beneficios en forma de “salario emocional” que la empresa proporciona a los empleados pueden contribuir a retener el talento de los trabajadores. Algunos de estos beneficios complementarios son:
- Seguro de salud. Muchas empresas ofrecen a sus empleados un seguro de salud con condiciones ventajosas.
- Seguro de vida o plan de pensiones. Aunque no son los beneficios más comunes, también los ofrecen algunas compañías.
- Reembolso de matrícula por estudios. A medida que la formación se vuelve cada vez más importante, la empresa puede considerar que vale la pena pagar o contribuir al aprendizaje continuado de sus empleados.
- Beneficios sociales tales como cheque restaurante o cheques guardería, que además disfrutan de ventajas fiscales.
Ofrecer bonos e incentivos
Otra de las formas de retener el talento es ofrecer a los empleados la posibilidad de mejorar significativamente su salario base a través de diversos bonos e incentivos, que variarán en función de su rendimiento y de los resultados empresariales.
Estos incentivos pueden ser desde pagas extras hasta bonos, primas, pagos de dietas o viajes turísticos.
- Primas. Se pagan al trabajador por la calidad o cantidad del trabajo. Se abonan con el objetivo de incentivar al empleado y conseguir mejorar su productividad.
- Incentivos. Se trata de una retribución variable que se calcula a partir de la cifra de ventas de la empresa, del centro de trabajo o de la cifra de ventas individual del propio trabajador. Es una manera de perseguir objetivos, implicar a los empleados para conseguirlos y retener su talento. Es muy habitual que estos incentivos se paguen en especie, como sucede con los viajes turísticos, por ejemplo.
- Bonos. Se utiliza normalmente como retribución para el personal directivo, los altos cargos y demás personal cualificado. Normalmente están vinculados a los resultados de la empresa.
- Gratificaciones. A diferencia de los conceptos anteriores, la gratificación no está sujeta a criterios objetivos, sino que es una retribución que la dirección de la empresa concede al trabajador de manera voluntaria para premiarle por sus aportaciones, su dedicación o unos resultados excepcionalmente buenos.
